Encuentro con Diana Blok
23 de mayo 2023
“¿Las cosas son más de lo que son?” Tras la presentación de la obra de la fotógrafa Diana Blok, que hemos visto en la Galería Singel 100, mi hijo resumió la velada con estas palabras. Es la pregunta que también me viene a la cabeza sobre la obra que desconocía hasta esta noche.
Todo lo que mostró Diana esta noche era reconocible. Pero no porque lo hubiera visto antes. Podía situarlo y formar parte de él porque las imágenes tenían sentido. Y porque, con cada imagen, nos enseñaba personalmente una nueva forma de ver.
Mi recuerdo más cálido de la infancia es el de las tardes en que mi padre sacaba su proyector de diapositivas e íbamos con la familia, por enésima vez, a ver su colección de imágenes de su turbulento viaje en barco por los fiordos del sur de Chile. En un salón a oscuras, volvimos con él al viaje que una vez hizo al fin del mundo como joven ingeniero con tiempo tormentoso. Este era también el escenario de la parte trasera de la galería Singel100 esta noche. Las luces se atenuaron, y Diana tomó la palabra. Nos contaba del principio de su carrera, su exploración en los años 70, de la luz y la composición.
Fue un vuelo directo a través de los años, en dirección al presente a través de los lazos de sangre y la ingeniería social del género y la identidad. Hasta que, en mí opinión, pasó la obra más poética de la velada: imágenes hecho con un iPhone de hojas caídas en el suelo de un bosque tropical. Hallazgos casuales que producen cada vez un espectáculo nuevo, como las formas que sólo pueden revelársete en el contorno de una nube cualquiera.
Y de nuevo, detrás de cada imagen parecía esconderse la pregunta con la que empecé.
Claudio Tapia, socio de nuestra asociación